365 Nostalgic Items - #306 Despertador, Hucha y Triceratops

|    Diafragma: F-4.2    |    Obturación: 1/40 segs    |    ISO: 800    |    Sin Flash    |

Estos 3 objetos sí que me traen recuerdos...

El despertador me lo regalaron mis aitas en Valladolid cuando era txiki. Se acercaba mi cumple y me llevaron a una juguetería para coger un regalo. Y elegí el despertador. Me encantaba. Y como buen niño, cuanto más ruidoso el cachivache mejor que mejor.

Y a día de hoy, sigo aborreciendo la insufrible alarma con una demo de varias explosiones y sonidos de armas disparándose en 2 y 4 bits (que parecen sonidos de una ATARI 2600), que tiene el despertador. Y lo aborrezco no porque me disguste; que me encantaba entonces y me sigue gustando ahora; sino porque esos sonidos implicaban madrugar y por tanto no poder seguir durmiendo tan agustito. Al final como crío asocias las cosas según el momento.

El ratón de cerámica con bastón y sombrero es una hucha. Una hucha que ha guardado mis chines durante mucho tiempo. Formaba parte de una pareja, donde la figura femenina era de mi hermana. No sé cuantos años tendrán estas huchas, pero más de 27 fijo!!

Y el triceratops; como mi dinosaurio favorito (versión MINI en la Foto 135); forma parte de una colección de dinosaurios que me regalaron poco a poco cuando se inauguraron antiguamente los TODO A 100 PTS en el barrio.

En sus inicios, había juguetes que traían de una calidad más que decente. Y estos dinos eran la prueba. Costaron 100 pts cada uno y sin embargo, con el tiempo se revalorizaron una barbaridad. En mi colección dispongo de:

• Triceratops. Of Kadett que no podía faltar!!
• Estegosaurio.
• Diplodocus. (Aunque pasa más por Braqueosaurio)
• Pterodáctilo. (Que también pasaría por Pteranodón)

El único que no me agencié fue el REX de la colección. Era horrible y estaba más que deforme!! En su lugar me pillé un Godzilla cutre con cuernos; del "todo a 100" nunca mejor dicho; que haría las de Rex en el grupo, pero al final ni fu ni fa con el tiempo, era horrible también!!

En fin, como era de esperar la calidad de los juguetes en los TODO A CIEN, menguaron una barbaridad. Sino, como negocio no salía a cuenta.

  

¡¡Qué recuerdos!!

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